Cómo proteger a tu mascota durante desastres naturales

La naturaleza está más temperamental que nunca debido al cambio climático. Inundaciones, terremotos, tornados, huracanes y demás sucesos de esta índole se abren paso y dejan consigo  destrozos y víctimas. Las mascotas son las más vulnerables en estos casos, pues, lógicamente, sus instintos los hacen reaccionar de maneras que pueden ponerlas en peligro. Incluso, se ha detectado por medio de estadísticas, que los peludos suelen ser de los más perjudicados durante estas tragedias.

 

Debes tener un plan bajo la manga en caso de emergencias para así proteger a tu mascota durante desastres naturales, ya que es un miembro más de la familia y depende de ti a toda costa para estar a salvo durante estos hechos.

En el presente artículo, te proporcionamos toda la información que necesitas para proteger a tu mascota durante desastres naturales y las previsiones que debes tomar en momentos más críticos.

 

 

Catástrofe inesperada

 

Nadie sabe a ciencia cierta en qué momento ocurrirá una catástrofe natural, es algo que no se puede predecir y que por esto, siempre resultan ser una desagradable sorpresa. Independientemente de que sea algo inesperado, tienes que actuar de la manera más prudente, por ti y los que más amas.
Supongamos que es de madrugada y ocurre un movimiento telúrico. Aunque la primera reacción de muchos sería
salir de una sola carrera sin importar lo que quede atrás, no puedes permitir que el miedo te gane. Recuerda que tienes una mascota que depende de ti y cuya integridad física podría peligrar si no se mantienen a tu lado durante estos momentos.

 

Toma a tu peludo, cárgalo si su tamaño lo permite y salgan del lugar para ubicarse en algún espacio en el que no hayan estructuras alrededor que pudieran ceder. Asimismo, su correa debe estar en un lugar accesible, para que al momento de intentar evacuar el hogar, puedas tomarla.

 

No te separes de tu mascota en ningún momento y trata de calmarlo con tu presencia. No olvides que no tiene idea de lo que ocurre, está confundido y con miedo. Algunos peludos suelen ponerse agresivos durante eventualidades como esta, por lo que no es una mala idea que lleves un bozal.

En caso de huracanes o inundación, lo más prudente sería llevarlo contigo a un refugio de inmediato (ubica los establecimiento donde admiten peludos).

 

¡Mejor prevenir!

Si es cierto que las catástrofes no se pueden predecir, por eso es necesario que estés prevenido para brindarle el mayor bienestar a tu mascota durante las horas de incertidumbre que vendrá posteriormente.

  • Ten preparado un kit de emergencia para tu mascota: En este bolso es primordial que tengas agua potable, comida enlatada, artículos para primeros auxilios, medicamentos en caso de que los necesite, un collar y correa extras, mantas, periódicos y una caja de arena portátil -en el caso de los felinos.- Este kit debes renovarlo al menos cada año, para cambiar los artículos que puedan haber expirado.

 

  • Dentro del kit, es sumamente importante que lleves material fotográfico de tu peludito. Te preguntarás ¿para qué? y la respuesta es fácil: Es bastante común que en desastres naturales con toda la zozobra que se genera que las mascotas escapen y se extravíen, las fotos te serían de mucha ayuda si necesitas recuperarlo.

 

  • A su vez, es conveniente que tu peludín tenga un microchip con información actualizada o si es más accesible para ti, una placa que contenga información: El nombre del peludo, tu dirección, teléfono y demás datos que en caso de estar perdido podrían servir para que alguien lo lleve a ti de nuevo. También podrías incluir el número de algún familiar que no resida en el área en la que ha ocurrido el desastre, en caso de que no pudiesen contactarse contigo.

 

  • Si estás en una situación en la que debes acudir a un refugio, debes localizar uno que acepte mascotas, pues no todos lo hacen.

Aquí te hablamos más a fondo sobre el botiquín de primero auxilios para tu mascota.

¿Cómo reaccionar ante distintos fenómenos naturales?

 

Cada desastre natural exige diferentes formas de reaccionar, pero lo que todas tienen en común es que, para salir sano y salvo de ellos debes actuar con la prudencia que amerita. Cuando tienes una mascota y vives alguna catástrofe de esta clase, ya no puedes pensar solamente en ti, ya que los peludos son incluso más indefensos que los seres humanos durante estos escenarios.

 

Estos son algunos de los aspectos que debes tomar en cuenta ante los distintos fenómenos naturales:

 

Huracán

Para mantenerte a salvo a ti y a tu mascota durante un huracán debes procurar encontrarte en los pisos inferiores de una vivienda o incluso un sótano que carezca de ventanas. Si pudieras llevar el kennel de tu peludito contigo sería ideal, pues este actuaría como refugio durante el desastre. Asimismo, nunca debes soltar este transportín. Si finalmente acudiste a un refugio, procura llevarlo para que tu mascota esté mejor resguardada.

Inundación

Si eres víctima de inundaciones en tu localidad, lo más prudente que puedes hacer es mudarte con tu peludito a los pisos superiores de tu vivienda -de poseerlos.- Por otra parte si no tienes dicha posibilidad, acude lo más pronto a un refugio para víctimas del desastre, es importante que admitan mascotas.

A su vez, si decides evacuar a otra ciudad mientras la etapa de inundaciones sede, jamás dejes a tu mascota en casa, ya que el agua podría entrar al hogar y causar destrozos, además de ser fatal para tu peludo.

 

Sismo

Durante un sismo, trata de no alterarte demasiado, pues las mascotas perciben nuestras reacciones y se alteran con mayor facilidad. Durante los movimientos de tierra, evita que tu mascota se oculte bajo objetos como mesas o sillas porque nunca sabes si van a ceder. Lo mejor es que te posiciones bajo el marco de una puerta y que llames a tu peludo para que esté en el mismo lugar que tú. Finalizado el temblor, procura recoger tu kit de emergencia y salir con él a algún espacio abierto sin grandes y pesadas estructuras alrededor. Colócale su correa y no se separen.

 

 

Consideraciones para proteger a tu mascota durante desastres naturales

  • Procura conocer cada recoveco que pudiera ser un escondite para tu mascota. Durante un desastre, lo más probable es que traten de ocultarse por miedo. No puedes permitir que se quede ahí porque podría correr peligro.
  • Si sucede un incendio, independientemente de las causas que lo originen, no dejes al peludo en el sitio en llamas. De no encontrarlo, deja las puertas abiertas, para que así pueda salir.
  • Nunca dejes a una mascota durante un desastre natural, pues es un momento lleno de terror y confusión en el que necesitan estar a tu lado.
  • Después de un fenómeno natural, debido al impacto que representa esto emocionalmente, algunas mascotas quedan en shock. El estrés post traumático se puede tratar, todo es cuestión de darle las atenciones y caricias que merece, llévalo de paseo y realicen las actividades a las que está acostumbrado. Siempre debes consultar con el veterinario. 
  • Es muy común ver mascotas que deambulan por ahí luego de un desastre. Si encuentras a algún peludo que parece haber escapado, bríndale una mano amiga. Pero con cuidado, está confundido y asustado por lo que tal vez reaccione de manera agresiva.

Ten paciencia, ponte a su nivel y poco a poco gánate su confianza. Dale su espacio, pero al mismo tiempo proporciónale atenciones. Revisa si posee algún tipo de identificación o si está herido. Llévalo a algún lugar seguro y contacta a alguien versado en primeros auxilios de peluditos. A partir de ese momento, puedes dedicarte a encontrar a su familia. Puedes pegar avisos o incluso valerte de las redes sociales para difundir que encontraste al peludo.

 

Las mascotas son víctimas silenciosas,  por eso dependen de sus humanos al 100% para recibir ayuda, refugio, alimento y la protección necesaria. Los peludos obran según su instinto y ante una inundación, un sismo o un huracán, no pensarán antes de actuar. Procura que esté a tu lado, movilízalo contigo y dale toda la seguridad posible. Recuerda que no tiene muchas opciones para pedir auxilio. Proteger a tu peludito y mantenerlo contigo a pesar de la adversidad es un acto de amor incondicional.