Historias PetsGo

 

 Andreína Veliz y Chuno

Desde hace 2 años vivo en Madrid, me fui con mi novio, sin mi familia y sin Chuno. Para mí fue bastante difícil estar lejos, no solo de mi familia, sino de mi «hijo canino», por eso empecé a investigar acerca de todas las empresas que se encargan del viaje al exterior de las mascotas y mi miedo era que Chuno es braquicéfalico, es «chatico» y todas las empresas me decían que no se hacían responsables de él, que se podía asfixiar, ciertas líneas aéreas no lo aceptaban, que lo tenían que anestesiar, y yo no quería hacerlo por las consecuencias.

Casi desistiendo, llegué a las profesionales manos PetsGo quienes, además de encargarse de todo el papeleo necesario y transmitirme toda la calma del mundo, me dijeron que no había ningún problema con el hecho de que Chuno fuese braquicéfalico y que NO lo iban a anestesiar. De hecho, en todo momento se hicieron responsables de Chuno y me mandaron fotos de todo el proceso: Desde buscarlo a mi casa como todo un rey, hasta su chequeo en el aeropuerto. Lo bañaron el día anterior, lo dejaron bello, al día siguiente lo buscaron y salieron a pasear lo suficiente como para que durmiera de forma natural durante el viaje.

Reencuentro de Chuno y Belén. Aeropuerto de Barajas, Madrid-España.

Recibí a Chuno en el Aeropuerto de Barajas, proveniente de Caracas, de un vuelo de casi 9 horas, y ¡ llegó feliz a mis manos! Nunca imaginé ser tan feliz al abrazarlo y saber que estaba perfecto, lo extrañaba muchísimo, en serio las mascotas son como hijos y yo lo necesitaba para seguir mi proceso de adaptación en España.

Me vió y al principio estaba como orgulloso jajajaj, me imagino que pensaba: «Ajá, ¿tú crees que después de dejarme un año te voy a querer?» ¡Y sí! Al rato empezó a lamerme y yo le dije: «Te cumplí lo que te prometí, jamás te abandonaría».

Ahora salimos felices juntos, mi novio, Chuno y yo como una gran familia, a conocer los mejores parques de Madrid y de verdad que lo que hago es recomendar a PetsGo por su especial trato, y sobre todo, por responder a todas las preguntas que les hacía con tanta ansiedad. ¡Son los máximo!

 

 

 

 

Jesús Enrique Araujo y Suki

Por diversas razones hace 5 años nos tocó dejar nuestro país y mi hija Suki – una Golden – no cabía en la maletas, pero luego de que nos estabilizamos teníamos el compromiso de traerla con nosotros.

Decidí buscar información. Tarea bien difícil, envié al menos 20 correos y solo dos respuestas automáticas y nada más. Posteriormente, en el instagram vi un post de PetsGo y escribí. Me respondieron inmediatamente y el feeling fue inmediato. Comenzamos el proceso de fechas, precios y todo lo que envolvía al viaje de Suki. Desde el primer contacto les hice saber que no tenía a nadie que me ayudara con nada; que necesitaba desde asesoría, ayuda e incluso una mano amiga. Su respuesta siempre fue: Tranquilo, te ayudaremos.  El servicio fue excelente desde el primer contacto; seriedad y calidad humana que era lo que quería, no solo una empresa de transporte, era a mi viejita Suki a quien quería traer. Ella estaba muy desmejorada de salud ya que la persona que le atendía en Venezuela pasaba por muchas necesidades y el dinero que enviaba para su comida era destinado para la supervivencia de esa familia.

Suki, hija de Jesús Enrique A. Almeida. Calgary, Canadá.

PetsGo trasladó  a la veterinaria quien  evaluó, inyectó, cuido y mejoró a Suki en menos de un mes. Mi mamá y mi suegra dicen que ella sabía lo que hacía, porque la recuperación fue enorme. No tenía Kennel, así que en PetsGo me fabricaron uno. No tenía cómo trasladarla desde Guarenas, y ellos consiguieron el transporte. Suki no tenía dónde pasar la noche antes del viaje…ella fue hospedada, por eso digo que PetsGo lo hizo todo. Su calidad humana y entrega no tienen precio hoy gracias a Dios y a PetsGo puedo recuperar el tiempo con Suki y darle sus últimos años de vida con calidad y mucho amor. El cambio fue radical, venir de años sin comer bien, a una temperatura de 40 grados en Guarenas a Calgary (Canadá) con temperatura de -40 y Suki como si nada. Ver caminar al lado del monopatín de Benjamin o la emoción de Leonardo al verla mover su rabito eso no tiene precio.

Gracias a PetsGo. Dios bendiga su trabajo, siempre agradecidos por hoy tener a Suki con nosotros.

 

 

 

 

Carolina Alcalá y Enya

El viaje de Enya fue hace casi un año.  Gracias a la gente de PetsGo  tuvimos una experiencia maravillosa. Mi esposo y yo nos vinimos a vivir a San José (Costa Rica) y dejamos a Enya un mes con sus abuelos perrunos ( mis papás) mientras nos estabilizábamos aquí. PetsGo en ese mes se encargó de realizar las gestiones correspondientes para el traslado de Enya, nuestra perrita Beagle.

Enya en el aeropuerto de Maiquetía, esperando a reencontrarse con su familia en Costa Rica.

Salió de madrugada desde Maiquetía y arribó a San José a media mañana, aquí la fuimos a retirar a la aduana, pues aquí se necesita un agente aduanal, así lo   exige este país para poder ingresar a cualquier mascota. La esperábamos ansiosos con mis sobrinos y su alegría al vernos fue inmensa. Nosotros estábamos felices y agradecidos .

Enya sigue tan consentida como siempre, nosotros disfrutándola todos los días.

 

 

 

 

 Amnery y Trixy

Reunimos a Trixy  con su familia en Washington (USA) y la emoción de su mami Amnery fue tan grande, que las palabras se quedaron chiquitas. Por eso nos envió este vídeo espectacular de su llegada.